Muchos operadores piensan que la fórmula mágica de invertir en los mercados financieros se encuentra en analizar de la mejor manera posible un activo; ya sea utilizando el análisis técnico, fundamental o cualquier otro tipo de análisis que sirva para predecir los movimientos futuros de un activo.

Sin embargo, las emociones constituyen el 90 por ciento de éxito en este mundo, ya que de nada sirve analizar de manera perfecta, si a la hora de ejecutar y gerenciar una posición, sean los nervios los que predominen al inversionista.

Es muy cierto, que los seres humanos somos muy emocionales y que nos cuesta trabajo controlar esas emociones, es más, sería imposible llegar a no sentir emociones, ya que éstas constituyen el cerebro humano, pero, por otra parte, hay maneras de disminuir esos sentimientos a la hora de abrir una operación, con el fin de no caer en trampas innecesarias.

En este artículo se abordarán los mejores consejos psicológicos que permiten tener un mayor control sobre nuestras emociones a la hora de invertir.

 

  1. Crear un plan de trading: un plan de trading es la base de cualquier operador, en éste se establecen reglas que nos permitirán basarnos en disciplina a la hora de operar.
  2. Manejo de riesgo: las emociones actúan de manera distinta, cuando el operador arriesga dinero que no está dispuesto a perder, a cuando arriesga dinero que está permitido perder; de esta manera es recomendable empezar en este mundo de las inversiones con un riesgo no mayor al 1 por ciento de la cuenta.
  3. Asesoría durante el primer mes de operaciones: es muy distinto operar completamente solo, al hecho de tener un maestro al lado, esto permite al operador sentirse más cómodo con las operaciones que realice, ya sea que salgan bien o mal, se tendrá la plena certeza de que se ejecutaron de la mejor manera posible.
  4. Entender el entorno mental al operar: Ciertos métodos como utilizar un stop loss y una toma de utilidad, le permiten al operador saber que el riesgo que asuma por operación no podrá ser rebasado, esto ayuda bastante en el control de emociones.

En conclusión, un buen plan de trading va de la mano con la psicología de las inversiones, si se planea para ejecutar, se ejecuta para ganar, pero si no se planea para ganar, se ejecuta para perder. Es por esto que se debe considerar al plan de trading como una regla inviolable que constituirá una certeza adecuada para cualquier operación que se abra.